
Diversos estudios han demostrado que las tecnologías por sí mismas no producen cambios (hecho aceptado por los teóricos del área) y que éstos se producen principalmente por una combinación de un conjunto de condiciones que se organizan en torno a tres grandes dimensiones...
La presencia y uso de recursos TIC en entidades educacionales chilenas es una realidad, que refleja una situación cada vez más cotidiana de nuestra sociedad. Diversos sectores llaman a re-alfabetizarse, esta vez de manera digital, para poder enfrentar con éxito un mundo cada vez más tecnológico. La nueva generación de alumnos nació con esta tecnología y han sido definidos por algunos autores como “usuarios nativos” de los lenguajes, códigos y productos asociados a ella. Ante este escenario algunos educadores nos preguntamos: ¿Cómo puede llegar a impactar todo esto en mi sala de clases? ¿Es una moda pasajera o realmente estas tecnologías tienen el potencial de mejorar mis prácticas pedagógicas? y si lo tienen ¿Cómo puedo integrar estas tecnologías de manera efectiva en mi sala de clases? Mi experiencia práctica como docente universitario, ligado a la implementación del proyecto Enlaces desde su etapa piloto en 1994, me permite expresar con confianza que el programa Intel® Educar para el Futuro puede ayudar a resolver muchas de las interrogantes aquí planteadas, de forma más que satisfactoria.
Integración Efectiva de TIC
Revisando la historia reciente, podemos constatar que gracias al desarrollo del proyecto Enlaces, desde 1994 a la fecha, la casi totalidad de los establecimientos municipales y particulares subvencionados Chilenos, tanto de sectores urbanos como rurales, han recibido equipamiento computacional y programas específicos de capacitación sobre el uso de Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) por parte del Ministerio de Educación. Esto se ha desarrollado a través de una red nacional de universidades que colaboran a lo largo del país. Adicionalmente, y dependiendo de las posibilidades técnicas, un gran número de estas entidades educativas han obtenido acceso a Internet de manera gratuita.
El primer piso de Enlaces fue la entrega de tecnología (computadores) y la alfabetización digital de los docentes (capacitación en el uso del computador). Proceso que demuestra estar altamente consolidado, a raíz de los usos más frecuentes que docentes y alumnos hacen de este tipo de tecnologías hoy en día. Sin embargo, este escenario presenta diversos desafíos a los educadores y a las iniciativas Ministeriales, que apuestan por acercar las potencialidades de las TIC a aprendices y educadores, altamente demandantes de información y servicios de comunicación.
Por una parte, la obsolescencia de la tecnología se hace cada día más evidente en la medida en que los avances técnicos logrados por los computadores, las redes y los proveedores de contenidos, demandan nuevas potencialidades. Este proceso considera además la frecuente aparición de recursos digitales que traen consigo diversos beneficios para apoyar procesos de enseñanza, así como procesos personales de aprendizaje. Los precios de los equipos están en constante baja y las capacidades de estas tecnologías aumentan día a día, llegando incluso a ser percibida por algunos sectores como omnipresentes, lo que se expresa en forma de teléfonos celulares (con capacidades inimaginables hace algunos años atrás), reproductores de MP3, cámaras fotográficas y de video digital, así como computadores portátiles, también conocidos como notebooks, o laptops.
Por otra parte, el segundo piso del Proyecto Enlaces ha sido definido como la integración efectiva de las TIC en la sala de clases, focalizándose en la promoción de mejores prácticas educativas, que se espera, redunden en aprendizajes de calidad. Esta apuesta es compartida en el mundo por un gran número de tomadores de decisiones, quienes consideran que estas nuevas tecnologías pueden generar cambios nunca antes vistos. La decisión de promover el uso de TIC no ha sido tomada al azar, o en base a creencias particulares, sino que se derivan de un cúmulo de investigaciones educacionales que ha probado la efectividad de las tecnologías.
Diversos estudios han demostrado que las tecnologías por sí mismas no producen cambios (hecho aceptado por los teóricos del área) y que éstos se producen principalmente por una combinación de un conjunto de condiciones que se organizan en torno a tres grandes dimensiones: el contexto donde se implementan, las características del innovador que las aplica y las propiedades específicas que posee esta innovación. Estas condiciones poseen características de ausencia y presencia en mayor o menor grado, lo que facilita o dificulta la integración de tecnología.
Por ejemplo, a nivel de contexto, la ausencia o presencia de computadores, actúa como una condición de contexto desequilibrante a la hora de integrar TIC. Similar situación surge a nivel de docentes con la familiarización de éstos en cuanto al uso y manejo adecuado de recursos TIC, pero ¿qué ocurre si estas condiciones han sido satisfactoriamente logradas? Surge entonces la necesidad de focalizarse en la innovación y comprender cómo una adecuada definición de ésta puede ayudar a armar este puzzle educativo.
¿Por qué Educar para el Futuro?
El programa Educar para el Futuro, que desde el 2004 implementa Intel Chile en cooperación con el Ministerio de Educación y un conjunto de universidades nacionales, se focaliza en la tercera dimensión, la innovación, ya que es un programa de capacitación directamente orientado a ampliar la visión de los educadores sobre diversas estrategias destinadas a integrar de manera efectiva el uso de recursos TIC.
El gran valor de esta iniciativa es el potenciar elementos pedagógicos, como son el uso de preguntas orientadoras del currículum, el aprendizaje basado en proyectos y la evaluación auténtica, por sobre los recursos tecnológicos, todo esta bajo una óptica teórica derivada de la aproximación pedagógica “comprensión por diseño” (Understanding by Design). La mirada de “comprensión por diseño” define que los objetivos de un programa de capacitación puede ser organizados a en base a tres niveles: comprensiones esenciales (enduring understanding), comprensiones importantes (important understanding) y compresiones con las cuales los aprendices deben estar familiarizados (familiar understanding). Es importante indicar que el concepto de “comprensión” en este contexto es definido como un desempeño flexible ante una determinada situación.
En el caso del curso Educar para el Futuro, el nivel de lo “esencial” está destinado a la ampliar en los participantes su visión y comprensión de las potencialidades de las TIC y de las estrategias pedagógicas que permiten su integración efectiva. Además se centra en los elementos pedagógicos antes mencionados, los cuales son experimentados desde el rol del docente, así como del alumno. El nivel de lo “importante” está focalizado en las herramientas computacionales que potencian las destrezas esenciales. El manejo adecuado de software, redes de datos y equipamiento computacional es sólo “importante” y no “esencial”, debido a que su obsolescencia es muy alta. Además, la alfabetización sobre el manejo de un determinado recurso puede ser algo ya logrado por el docente, ya sea a través de capacitaciones previas, manuales de auto-instrucción, uso de la ayuda en línea o intuición basada en ensayo y error. En el campo de lo “familiar”, pueden situarse todos los conceptos técnicos asociados a sistemas operativos, uso de plataforma y otros elementos no críticos, asociados a la cultura informática.